Por Salvador Carrillo. Psicólogo Terapeuta
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Estoy cada vez más convencido de que las personas necesitan cambios. Cada cierto tiempo nos renovamos o si no la vida se vuelve insípida. Creo que la soledad es un campo de potencialidad para que nuevas cosas ocurran.
Levanto una ceja cuando una persona viene y me dice “me siento mal y me quiero sentir bien, pero no quiero realizar ningún cambio, eso no me interesa”. No nos podemos sentir bien a voluntad. Es más, no nos podemos sentir siempre bien. Me interesa mucho hacer entender a las personas que sentirse mal no es algo malo. El malestar emocional es también una señal de que estamos vivos.
No está mal buscar salir de la soledad: lo importante es el cómo. Quiero motivar a las personas que busquen desarrollar vínculos sin desesperarse. Considero que la soledad duele, pero hay que tenerle paciencia a ese dolor, aprender manejarlo. Porque si no, la desesperación nos llevará a un pobre rendimiento al momento de buscar establecer vínculos.
He conocido en el consultorio a cientos de personas que sufren por la soledad. Y me parece que aquellas que más la sufren son quienes tienen más expectativas sobre los otros. Es como un niño que le han llenado la cabeza de expectativas sobre Disney. Este sufre más por no ir a Disney que el que no tiene muchas expectativas sobre ese lugar. Me es evidente que muchas personas ven en la posibilidad de vínculo con el otro, especialmente en el ámbito de pareja, una inmensa y única promesa de felicidad.
Algo que me gusta decir en mis audios, videos y libros (por cierto pueden descargar gratis mis libros en terapiacarrillo.com) es que el mundo real es complejo. No tiene un solo aspecto, sino muchos. Y los seres humanos somos complejos, no tenemos una sola dimensión. El amor de otra persona no es la absoluta solución a todas nuestras carencias y a la falta de sentido de la vida. Y no solo eso, tengo la fuerte impresión de que quien equivocadamente espera que el otro tenga un amor capaz de llenar todos sus aspectos nunca podrá formar un verdadero vínculo con alguien porque está esperando demasiado.
Los complejos que una persona pueda tener por su fracaso laboral o sus dudas religiosas no se van a ver resueltos por el amor de una pareja o de un grupo de amigos. El cariño de los otros solo resolverá (aunque no totalmente) el aspecto que concierne a vínculos personales, no más.
Quienes se sienten solos, pero no sufren tanto por ello, me parece, son quienes tienen expectativas sanas. Y en su soledad, además de buscar compañía, buscan llenar sus demás vacíos con actividades y aprendizajes. Buscan mejorar económicamente, iniciar alguna actividad física, aprender un tema, etc. Pues el desarrollo de esos otros aspectos hace que a pesar de que aún no esté solucionada la soledad, la vida se sienta más llena y tengan más confianza en su propio ser.
Este tema me parece es uno de los grandes temas de la humanidad. Noto en las consultas que me hacen las personas y en los testimonios de la gente a mi alrededor un dolor muy hondo por no conseguir conectar de una manera real con otra persona. Espero de corazón que apliques los consejos que he compartido hoy contigo.